El final de la República de Roma

Si os interesa la historia de la antigua Roma, en especial el último siglo de la República Romana, hay dos ensayos históricos que os recomiendo vivamente. El primero es "Rubicón", del escritor británico Tom Holland.

El segundo es una magnifica obra de un escritor español, Javier Negrete, titulado "Roma Invicta".

Cada uno de estos excelentes ensayos históricos nos relata de forma sencilla y asequible como una república, basada en principios democráticos, se convirtió prácticamente una monarquía hereditaria.

Roma se convirtió en un gran imperio, el mayor que el mundo ha conocido, dominaba todas las tierras que circundan el Mar Mediterraneo, lo llamaron el "Mare Nostrum", nuestro mar. Conquisto la mayor parte de Europa, el norte de África y Oriente Próximo. Una cuarta parte de los habitantes de nuestro planeta estaban sometidos al dominio de Roma, era una situación que daba paz, además cualquier habitante del Imperio Romano tenía la posibilidad de convertirse en ciudadano romano, con todos los derechos inherentes a esa condición.

Al mismo tiempo la ciudad de Roma creció hasta convertirse en una gran metrópolis, las cifras varían mucho según las fuentes, pero al final de la república la población debía de ser, como mínimo, de un millón de habitantes.

Plano de la ciudad de Roma al final de la república

Las conquistas de Roma se debieron a su organización política y a su ejercito, el mejor del mundo en aquel entonces, comparable a los mejores ejércitos profesionales de la actualidad. Perfectamente entrenado, perfectamente equipado, muy disciplinado y con especial atención a la logística. En un posterior artículo trataré este tema con la extensión que se merece.

Legionarios romanos a punto de entrar en combate, escena de la serie de TV "Roma"

Por supuesto la democracia romana no funcionaba exactamente igual que las democracias actuales. El sistema de votaciones estaba pensado para que solo los más ricos tuvieran la oportunidad de elegir a los magistrados y que las leyes propuestas por estos favorecieran los intereses de la minoría más privilegiada, aunque quizás esto último no sea muy diferente de lo que ocurre en la actualidad.

Era un sistema muy complicado pero intentaré describirlo.

Los órganos más "democráticos" eran las asambleas populares. En ellas todo ciudadano romano tenía derecho a votar, pero no todos los votos tenían el mismo valor.

Los romanos se organizaban en tribus, era el equivalente de un distrito electoral. Existían 35 tribus, cuatro de ellas eran las "tribu urbanae" y en ellas estaban los romanos de clase baja. Las otras 31 tribus eran las tribus rurales, en ellas estaban los ciudadanos con mayor poder económico. El sistema era dividir a los ciudadanos de acuerdo con sus medios económicos. Los que tenían dinero estaban en las tribus rurales, el resto en las tribus urbanas.

El modo de aprobar leyes y elegir magistrados era por votación de las tribus como bloque, cada una de las tribus tenía un voto. Por tanto ocurría que cualquier decisión estaba en manos de los poderosos, los pertenecientes a la primera y a la segunda clase que estaban en las tribus rurales.

Esquema del sistema de gobierno de la República de Roma

Por ejemplo, un magistrado lanza una ley para el reparto de trigo gratuito. Se vota en la asamblea, tenemos a cientos de miles de ciudadanos encuadrados en las tribus urbanas los cuales están a favor de esa ley. Pero el resto de las tribus, formadas por los pocos miles de ciudadanos acomodados, vota en contra. Resultado 31 votos en contra de la ley de reparto de trigo y solo cuatro votos a favor.

Semejante sistema aseguraba que solo se aprobaran leyes y se eligieran magistrados que respaldaran los intereses de los poderosos. Como ya os podéis imaginar con frecuencia las asambleas acababan violentamente, especialmente teniendo en cuenta que no había oportunidad de debatir, algo imposible en una asamblea en donde participaban miles de personas.

El otro órgano, quizás el mas conocido para la mayoría de nosotros, era el senado, sería el equivalente de nuestro parlamento. En el si que se debatían las leyes que luego se llevaban a las asambleas para su aprobación por el pueblo. Sin embargo el modo de pertenecer al senado no era por votación directa de los ciudadanos. La condición ineludible para ser miembro del senado era haber sido elegido magistrado, como mínimo, ser cuestor o tribuno de la plebe. Dado que el sistema de votación de las asambleas aseguraba que se eligieran magistrados favorables a los intereses de los poderosos eso perpetuaba el poder de estos. Por otro lado había otra segunda condición, el tener, como mínimo una renta anual de 1.000.000 de sextercios. Como además no se cobraba por ser magistrado es evidente que solo los pertenecientes a las clases más adineradas podían pertenecer al senado, eran los únicos capaces de permitirse una carrera política.

Marco Tulio Ciceron en el senado de Roma, escena de la serie de TV "Roma"

Aunque el senado era, en teoría, un órgano que solo daba recomendaciones para su posterior aprobación en las asambleas populares, estas recomendaciones tenían mucho peso y cualquier magistrado que quisiera aprobar medidas que favorecieran a los menos privilegiados se exponía al asesinato. Eso ocurrió en el siglo II A.C. con los hermanos Graco, que quisieron aprobar leyes para el reparto de trigo y tierras entre los ciudadanos pobres.

Roma se enriqueció muy rápidamente en el siglo II antes de Cristo, desde el final de la II Guerra Púnica hasta la conquista de Grecia. Cuando una sociedad se enriquece a ese ritmo lo habitual es que esa riqueza se reparta de forma muy desigual. Algo parecido nos ha ocurrido en España con la llamada "burbuja inmobiliaria".

Los territorios dominados por Roma en la 2ª mitad del siglo II A.C

Todo esto dio lugar a una larga serie de conflictos sociales que desembocaron en varias guerras civiles. Tres de ellas en un lapso de apenas veinte años. La más violenta y larga de estas guerras civiles fue la que enfrento a Julio César, el conquistador de las Galias, un líder popular, contra el senado, donde estaban las clases más privilegiadas de Roma.

Fueron cuatro largos años, del 49 al 45 A.C., de guerra civil entre romanos que tuvo por escenario todas las tierras que circundaban el Mar Mediterráneo. Triunfó César y fue nombrado dictador vitalicio con el apoyo de la mayoría del pueblo romano. Los nobles romanos no podían soportar la perdida de sus privilegios, también les resultaba chocante la presencia de Cleopatra, la Reina de Egipto y amante de César.

Entrada de Cleopatra en Roma, del fím "Cleopatra" de 1963

Empezó a correr el rumor de que César ambicionaba convertirse en Rey de Roma, algo impensable para los antiguos romanos que tenían una animadversión a la idea de la monarquía solo comparable a la que tienen los actuales Estados Unidos de Norteamérica. Varios de los antiguos enemigos de César y algunos de sus partidarios se confabularon para acabar con esa situación. Al final lo asesinaron en la Curia de Pompeyo, en los Idus de marzo, el 15 de marzo del año 44 A.C.

Magnicidio de Cayo Julio César en la Curia de Pompeyo

No sirvió de nada la muerte de César, al contrario, originó otra guerra civil. Por un lado los herederos de César dirigidos por Cayo Julio César Octaviano, sobrino nieto de César y heredero de su nombre y fortuna por testamento y Marco Antonio, primo segundo de César y su mejor general. Al otro lado los republicanos encabezados por Marco Junio Bruto y Cayo Casio Longino.

Los territorios dominados por Roma a mediados del siglo I A.C. tras las conquistas de César 

Ganaron los cesarianos, la batalla de Filipos fue el entierro definitivo de la República de Roma. Pero las guerras civiles continuaron, esta vez entre César Octaviano y Marco Antonio. César Octaviano se presento como el fiel defensor de la tradición romana, el dominio de occidente. Marco Antonio, aliado con Cleopatra, la reina de Egipto, se presentó como el heredero de la tradición helenistica, el imperio multicultural de Alejandro Magno. Otra guerra civil entre romanos, la tercera en menos de veinte años.

Tras ese periodo tan convulso los romanos, agotados de tantos conflictos, tuvieron que escoger entre libertad y seguridad. Escogieron la seguridad y eso dio origen a los emperadores. el primero de ellos Cayo Julio César Octaviano que, tras su triunfo sobre Marco Antonio y Cleopatra, adoptó el nombre de Augusto.

Estatua de César Augusto, el primer emperador de Roma

Augusto siguió ampliando los dominios de Roma pero con una mentalidad conservadora, quería tener unas fronteras seguras. Tras su muerte las fronteras del Imperio Romano cambiaron muy poco.

El Imperio Romano tras las conquistas de Augusto

Durante el siglo I y las primeras décadas del II Después de Cristo se añadieron algunas nuevas provincias: Mauritania (el norte de los actuales Argelia y Marruecos), Capadocia (el centro de la actual Turquía), Tracia (más o menos la actual Bulgaria), Britania (las actuales Inglaterra y Gales), Dacia (la actual Rumania), Arabia Nabatea (la actual Jordania) y, durante un breve tiempo, durante el mandato del emperador Trajano, Armenia y Mesopotamia (el actual Irak). En ese momento, en la segunda década del siglo II D.C., el Imperio Romano alcanzó su máxima extensión, alrededor de nueve millones de km2, aproximadamente la extensión de los actuales Estados Unidos. En todo el mundo solo había otro estado que se pudiera comparar, el Imperio Chino, pero entre Roma y China había una diferencia fundamental, los romanos eran ciudadanos mientras que los chinos eran súbditos.

El Imperio Romano a principios del siglo II D.C.

La población total del Imperio Romano a principios del siglo II D.C. es objeto de muchas controversias, pero la mayoría de los historiadores están de acuerdo en que podía superar los cien millones de habitantes. En la actualidad puede parecer una cifra relativamente modesta, pero en esa época la población total del mundo no llegaba a los quinientos millones, por tanto alrededor de una cuarta parte de la población total de nuestro planeta vivía dentro de las fronteras del Imperio Romano.

La ciudad de Roma también siguió creciendo en extensión y en población, en las primeras décadas del siglo II tenía una extensión y una población similar a la de la actual casco urbano de Barcelona, unos 60 km2 y unos dos millones de habitantes. Si algún día tenéis la oportunidad de visitar Roma os recomiendo acercaros al "Museo de la Civilización Romana", en el, entre otras piezas de interés, hay una enorme y detallada maqueta, de más de 20 metros de lado, que nos muestra el aspecto de la Roma Imperial, una ciudad verdaderamente monumental, una metropolis que no tenía rival en esos momentos. Por cierto esa maqueta se utilizó en la película "Gladiator", en concreto en la imagen a vista de pájaro de Roma al principio de la escena en que Cómodo entra en Roma.

El centro de Roma según la maqueta del Museo de la Civilización Romana

Roma fue la primera superpotencia mundial que no era una monarquía sino una república cuyos ciudadanos tenían derechos tan importantes como la libertad de expresión. Pero acabo convirtiéndose casi en una dictadura militar, es algo que no deberíamos olvidar.

Sin embargo no todo era tan simple, incluso bajo el gobierno de los emperadores los romanos siguieron siendo ciudadanos, con derechos reconocidos por ley, algo que ningún otro estado en aquellos tiempos podía decir y que tampoco pueden decir muchos, por no decir la mayoría, de los estados modernos. El propio emperador, cuyo titulo era "Princeps", primer ciudadano, estaba sujeto a la ley. Cuando un emperador intentaba gobernar de forma totalmente autoritaria tarde o temprano caía víctima de una conspiración. Eso les ocurrió, entre otros, a Caligula, Nerón, Domiciano, Cómodo y Caracalla. No fue hasta finales del siglo III D.C., con Domiciano, que el emperador se convirtió en "Dominus", señor, y entonces Roma se convirtió en una verdadera monarquía absoluta.

Los últimos cien años de la República Romana fueron un periodo de la historia fascinante, con personajes de la talla de Publio Cornelio Escipión Emiliano, los hermanos Tiberio y Cayo Sempronio Graco, Marco Emilio Escauro, Cayo Mario, Lucio Cornelio Sila, Lucio Licinio Lúculo, Marco Licinio Craso, Lucio Sergio Catilina, Gneo Pompeyo Magno, Marco Tulio Cicerón, Publio Clodio, Cayo Julio César, Marco Antonio, Marco Junio Bruto, Cayo Casio Longino, el rey Yugurta de Numidia, el rey Mitridates del Ponto, el rey de los galos Vercingétorix, la reina Cleopotra de Egipto y el que se erigió en el triunfador, Cayo Octavio, sobrino nieto de César y adoptado como hijo en su testamento con el nombre de Cayo Julio César Octaviano, el primer emperador de Roma con el nombre de Augusto.

Los más fascinantes personajes de Roma, de izquierda a derecha: Mario, Sila, Cicerón, Pompeyo y César

La democracia no es un sistema perfecto, ni mucho menos, pero es el menos imperfecto de los ideados por el hombre. Claro que hay muchos tipos de democracia, unos menos imperfectos que otros. Nuestra democracia tiene muchos defectos, pero al menos tenemos la oportunidad de defender nuestras ideas mediante la palabra y no mediante las armas. Solo por eso merece la pena defenderla y, por supuesto, intentar mejorarla.

Os dejo unos cuantos enlaces que estoy seguro que os van a interesar.

El libro de Tom Holland "Rubicón" en formato PDF.

Rubicon, Tom Holland

El libro de Javier Negrete "Roma Invicta" también en formato PDF.
Roma Invicta, Javier Negrete

Un buen documental en el que se compara la antigua Roma con los Estados Unidos, una comparación muy acertada en mi opinión.
El Imperio de Roma, la primera superpotencia mundial, documental.

Una buena manera de introducirse de lleno en la historia del final de la República Romana es la serie de novelas históricas escritas por la escritora australiana Colleen Mc Cullough.

En este enlace os las podréis descargar en formato PDF, realmente valen la pena, están muy bien documentadas.
Saga "Roma" de Colleen Mc Cullough

Un muy buen trailer de la serie de televisión "Roma". Conozco muy bien la historia de la antigua Roma y puedo deciros que describe muy bien el ambiente del final de la República de Roma. Hay otras grandes películas y series de TV dedicadas a la antigua Roma, por ejemplo "Yo Claudio", "·Espartaco", "Gladiator", "Cleopatra", pero esta serie de TV es magnifica. Con grandes actores, una ambientación perfecta y, sobre todo, nos da a conocer la vida de los ciudadanos romanos corrientes, algo que ningún otro film o serie de TV nos ha permitido conocer.
Roma, serie TV, trailer

Un vídeo con los primeros minutos del primer capítulo de esta excepcional serie de televisión. Esos primeros minutos nos narran la situación de Roma a mediados del siglo I antes de Cristo. Además la batalla es muy realista, así combatían los legionarios romanos y así eran sus uniformes y sus armas a mediados del siglo I A.C.
Roma, serie TV, principio capítulo 1º

En este enlace podréis descargar todos los episodios de esta magnífica serie de televisión.
Roma, serie de televisión capítulos completos

El enlace al trailer de una gran obra maestra del cine "Cleopatra", de 1963. Es todo un clásico dirigido por Joseph L. Mankiewicz y con actores de la talla de Richard Burton, Rex Harrison y Elisabeth Taylor.
Cleopatra, trailer de la película.

Un muy buen artículo de un blog en que se nos habla de las guerras civiles del último siglo de la República de Roma, los comentarios que hacen los participantes del blog son muy interesantes..
Roma, guerras civiles en el último siglo de la república, artículo.

Un buen documental en el que se nos narra la historia de la República de Roma.
La República de Roma, documental

Un muy buen documental sobre el gran triunfador de las guerras civiles de Roma, Cayo Octavio, Cayo Julio César Octaviano, Augusto.
Augustus, documental

Un artículo dedicado al "Museo de la Civilización Romana".
Museo della civiltà romana

Una muy interesante mini serie de televisión basada en la vida de Cayo Julio César, esta muy bien ambientada y documentada.
Julio César, serie TV, 1ª parte
Julio César, serie TV, 2ª parte

Finalmente el artículo de mi blog dedicado a Cayo Julio César, tiene un gran número de ilustraciones y al final varios enlaces en donde ampliar información.
Cayo Julio César, artículo