La historia del Buque Mercante Armado de Su Majestad H.M.S. Bounty es la del motín más famoso de la historia de la navegación, una extraordinaria aventura.
Replica del H.M.S. Bounty navegando por un mar un tanto movido
Hace dos siglos y cuarto, en el año 1789 se produjo el más famoso motín de la historia de la navegación. Es una historia fascinante, al igual que sus dos principales protagonistas, William Bligh y Fletcher Christian.
Fletcher Christian y William Bligh, fotograma de la película "The Bounty" de 1984
El capitán James Cook fue uno de los mayores exploradores del mundo. Con pequeños barcos dio la vuelta al el mundo tres veces, aunque la última no pudo completarla pues murió en un combate con los indígenas de las Islas Hawai.
La primera vuelta al mundo de Cook fue con motivo de observar un transito del planeta Venus por delante del Sol. El mejor lugar para observar ese extraordinario evento era el centro del Océano Pacifico y el mejor lugar de ese inmenso mar, el mayor de nuestro planeta, era Tahití. Esta isla fue descubierta para Europa unos años antes por el capitán Wallis, otro marino británico.
Retrato del Capitán Cook
El piloto de uno de los barcos de Cook en su segundo viaje de exploración fue William Bligh. Unos años más tarde le dieron el mando de una expedición con la misión de ir a Tahití a recoger frutos del árbol del pan. El árbol del pan era (y es) un fruto natural que crece en el Pacifico Sur. Los europeos le dieron ese nombre por su sabor. Al mismo tiempo pensaron que podría ser fácil de cultivar en cualquier zona del mundo con un clima similar, por ejemplo las colonias de América.
Por aquel entonces América estaba dominada por las principales potencias Europeas: España, Francia, Gran Bretaña y Portugal. Su economía se basaba en la explotación de los recursos naturales, más o menos igual que ahora. La mano de obra eran esclavos y se pensó en el fruto del árbol del pan como un alimento barato para estos.
Frutos del árbol del pan
Se envió una expedición a esa paradisíaca isla, el HMS Bounty, al mando de Bligh. Este creía en la disciplina y aplicaba el reglamento. Los azotes con un látigo eran un castigo habitual en esos tiempos por la menor falta, aunque parece ser que Bligh era más humanitario que la mayoría de los capitanes de barco de esa época.
El problema fue llegar a Tahití, necesitaron año para llegar allí. Durante ese tiempo la dura disciplina del mar hizo mella en los tripulantes de la Bounty, todos ellos atraídos por una gran aventura. En Tahití fueron recibidos de forma amistosa por los indígenas.
La llegada del H.M.S. Bounty a la Isla de Tahití, fotograma de la película "The Bounty" de 1984
Al llegar a Tahití se encontraron con un verdadero paraíso en La Tierra. Un clima tropical, bellos paisajes, comida en abudancia, indígenas amistosos y, sobre todo, hermosas jóvenes sin prejuicios sexuales, el sueño de cualquier marino.
Además, debido a que tenían que esperar a que los retoños del árbol del pan madurasen, la estancia se prolongó varios meses durante los cuales la mayoría de los tripulantes de la Bounty hicieron amistades con las nativas de la isla, entre ellos el segundo de a bordo. Fletcher Christrian, que se enamoró de Maimiti, la hija de uno de los jefes.
Dejo algunas fotografías de la isla de Tahití, la última es una vista desde un satélite artificial, con ellas os podréis hacer una idea de su belleza, quizás la isla más hermosa del mundo.
Una hermosa joven tahitiana
Además, debido a que tenían que esperar a que los retoños del árbol del pan madurasen, la estancia se prolongó varios meses durante los cuales la mayoría de los tripulantes de la Bounty hicieron amistades con las nativas de la isla, entre ellos el segundo de a bordo. Fletcher Christrian, que se enamoró de Maimiti, la hija de uno de los jefes.
El primer encuentro entre Christian y Maimiti, fotograma de la película "The Bounty" de 1984
Dejo algunas fotografías de la isla de Tahití, la última es una vista desde un satélite artificial, con ellas os podréis hacer una idea de su belleza, quizás la isla más hermosa del mundo.
Cuando llego el momento de partir todos los tripulantes de la Bounty tenían motivos para desear quedarse en Tahití. A los pocos días de la partida se produjo el motín, encabezado por Fletcher Christian y apoyado por la mitad de la tripulación.
Se hicieron dueños del barco y abandonaron al capitán Bligh y a sus partidarios en un pequeño bote de apenas siete metros de eslora (longitud). La pequeña embarcación estaba abarrotada, eran diecinueve personas las que iban en ella, tan sobrecargada estaba que la borda apenas asomaba veinte centímetros por encima de la superficie del mar. Recorrieron cerca de 6.000 km en ese pequeño bote, sin apenas comida y agua, una extraordinaria hazaña que nos muestra la gran pericia como navegante de Bligh, un líder que se crecía ante las dificultades y que en esa odisea dio ejemplo a sus hombres, comía y bebía exactamente la misma ración que los demás y se pasaba horas seguidas al timón, sin duda un héroe.
Los amotinados abandonan al capitán Blight y a sus partidarios
Los amotinados volvieron a Tahití, algunos de ellos se quedaron y fueron apresados dieciocho meses más tarde por una fragata británica, la HMS Pandora. Varios de ellos murieron, junto con gran parte de los tripulantes de la Pandora, en un naufragio cerca de las costas de Australia. Los que sobrevivieron se enfrentaron a un consejo de guerra, el resultado ya os lo podéis imaginar, todos aquellos que fueron considerados culpables de amotinarse acabaron en la horca.
Los amotinados que siguieron a Fletcher Christian, junto con sus mujeres tahitianas y seis tahitianos, partieron de Tahití con el Bounty. Al cabo de dos meses llegaron a la isla de Pitcairn, una pequeña roca en medio de la nada. En el mapa que hay tras este párrafo están los viajes de los diferentes protagonistas, en rojo la ruta seguida por la Bounty hasta el motín, en verde la ruta seguida por Bligh y sus leales con ese pequeño bote y en amarillo la ruta seguida por Christian tras el motín.
Mapa de los viajes de la Bounty
No fue una vida feliz. al cabo de pocos años y a pesar de los esfuerzos de Christian, se desato una lucha entre europeos y tahitianos, casi todos los varones murieron en este conflicto. Al final, de un modo u otro, se hizo justicia, de los casi veinte hombres que participaron en el motín o que tras el se sumaron a los amotinados, solo dos no murieron violentamente.
Esta historia se conoce sobre todo por el relato de Alexander Smith. el último superviviente del Bounty. Se lo contó al capitán de un buque norteamericano dedicado a la caza de focas, el Topaz, en el año 1808, casi veinte años después del motín. Dejo algunas fotografías de la Isla de Pitcairn (la última una vista aérea) donde todavía viven algunos de los descendientes de los amotinados, en ellas os podréis hacer una idea de lo agreste de la isla, no hay ni un solo lugar seguro en donde un barco pueda atracar a menos que sea una construcción artificial, un lugar perfecto en donde los amotinados podían refugiarse con pocas posibilidades de que los encontraran.
.jpg)
Se han escrito varias novelas sobre esta aventura, la más conocida probablemente sea la de C. H. Nordhoff y J.N. Hall. En ella se describe a Bligh como un hombre demasiado estricto que llega a rozar la crueldad, además de un miserable que se apropiaba parte de los fondos destinados a esa expedición para beneficio propio en detrimento del bienestar de sus hombres, solo durante el viaje en ese pequeño bote se nos muestra como un hombre de gran valor y pericia, preocupado por que sus hombres pasen las menores penalidades posibles. En cambio Fletcher Christian es descrito como un héroe romántico, empujado a amotinarse, generoso, que sufre por los marinos y que para librarlos de la tiranía se rebela. Sin duda eso vende muy bien, tanto en literatura como en cine, pero no tiene por que ser verdad, ni Bligh era tan mezquino ni Christian era tan generoso.
De esta extraordinaria aventura se han realizado tres versiones cinematográficas, cada una de ellas digna de verse. La primera, de 1935, con Clark Gable y Charles Laughton, es la que más se ajusta al relato de Nordhoff y Hall salvo el final, demasiado optimista. En ella se nos muestra a Bligh como un hombre cruel y mezquino y a Christian como un héroe romántico.
La segunda, de 1962, con Marlon Brando y Trevord Howard es la más conocida y quizás la más espectacular. También es bastante fiel a la novela histórica de Nordhoff y Hall, excepto en el final. El tratamiento de los personajes es algo más real y nos proporciona el que quizás era el mayor punto de fricción entre Bligh y Christian, la diferencia de clases. Bligh procedía de una familia humilde, fue ascendiendo poco a poco desde abajo trabajando duramente y demostrando su talento continuamente. Por el contrario Christian pertenecía a la pequeña nobleza, empezó en la marina británica como guardiamarina, un privilegiado, no tenía que demostrar nada, era un caballero y como tal era considerado superior.
La segunda, de 1962, con Marlon Brando y Trevord Howard es la más conocida y quizás la más espectacular. También es bastante fiel a la novela histórica de Nordhoff y Hall, excepto en el final. El tratamiento de los personajes es algo más real y nos proporciona el que quizás era el mayor punto de fricción entre Bligh y Christian, la diferencia de clases. Bligh procedía de una familia humilde, fue ascendiendo poco a poco desde abajo trabajando duramente y demostrando su talento continuamente. Por el contrario Christian pertenecía a la pequeña nobleza, empezó en la marina británica como guardiamarina, un privilegiado, no tenía que demostrar nada, era un caballero y como tal era considerado superior.
Para esta película se construyo una réplica de la Bounty que actualmente se encuentra en Maine (U.S.A.), esta replica ha demostrado tener muy buenas cualidades marineras. Dejo un corto pero apasionante documental en el que este buque se encontró con una tormenta a la altura de las Islas Bermudas cuando viajaba de Maine a Puerto Rico.
Aquí podréis verlo en pantalla completa, realmente impresionante.
La tercera versión de esta fascinante historia, "The Bounty", de 1984, es la que más se aproxima a la verdad histórica. Además cuenta con una preciosa fotografía, no es de extrañar, un velero navegando entre las islas del Pacífico Sur da mucho juego en este aspecto. Para esta película se construyo una réplica de la Bounty que actualmente está en Sidney (Australia).
La banda sonora es excepcional, obra de Vangelis, autor, entre otras, de las bandas sonoras de "Carros de fuego", "Blade Runner", "1492, la conquista del paraíso" y "Alejandro Magno". Por si eso fuera poco tenemos a dos grandes actores que empezaban a despuntar interpretando a Bligh y a Christian: Anthony Hopkins y Mel Gibson, respaldados por dos grandes actores que estaban al principio de su carrera Liam Neeson y Daniel Day-Lewis y dos veteranos más que consagrados: Laurence Olivier y Edward Fox.
Replica de la Bounty construida para la película de 1984 en el puerto de Sidney
Dejo unos cuantos enlaces en donde podréis conocer más a fondo esta fascinante historia, llena de aventura y romanticismo.
Un buen documental de National Geographic, en audio inglés, dedicado a la Bounty.
Un buen artículo dedicado a la novela histórica de C. H. Nordhoff y J.N. Hall.
Rebelión a bordo
El trailer de la película de 1935.
Rebelión a bordo, 1935, trailer
El trailer de la película de 1962.
Rebelión a bordo, 1962, trailer
Un magnifico vídeo de la película de 1984, con preciosas imágenes y la fenomenal música de Vangelis.
Aquí podréis disfrutarlo en pantalla completa, una obra de arte.
Motín a bordo, 1984, vídeo
Por último la película completa, está en audio inglés.
Motín a bordo, película completa
El trailer de la película de 1935.
Rebelión a bordo, 1935, trailer
El trailer de la película de 1962.
Rebelión a bordo, 1962, trailer
Un magnifico vídeo de la película de 1984, con preciosas imágenes y la fenomenal música de Vangelis.
Aquí podréis disfrutarlo en pantalla completa, una obra de arte.
Motín a bordo, 1984, vídeo
Por último la película completa, está en audio inglés.
Motín a bordo, película completa
Muy interesante, tal como habíamos comentado algún día en el chat de Facebook.
ResponderEliminarLo que no me explico es cómo diablos sobrevivieron los fieles a Blight... Toda una hazaña!
Si Skywalker, fue toda una hazaña la odisea de los que se embarcaron con Blight en ese pequeño bote. Recorrieron casi 6000 km con esa cascara de nuez.
ResponderEliminarWilliam Bligh era un marino excepcional, se crecía en las dificultades, solo perdió un hombre en toda la travesía con esa pequeña embarcación, sin apenas provisiones y agua. Sin duda una gran hazaña.
La historia popular considera a Blight como un tirano, pero en realidad era más humanitario que la mayoría de los oficiales de la armada británica. El problema fue estar tanto tiempo en Tahiti, un paraíso en la tierra y que nadie querría abandonar.